Que comprenda la lección,
nuestro Señor Presidente,
que entienda que prepotente,
no es la mejor actuación.
Hay que buscar solución,
como dicen, consensuando,
y no es que estoy apoyando,
la acción de la policía,
que aunque siendo minoría,
al pueblo está preocupando.
Nuestro pueblo Ecuatoriano,
reconozco, aunque me duela,
no es como el de Venezuela,
ni como el pueblo Cubano.
Usted se ha dado la mano,
tan sólo con la derecha,
que con cariño la estrecha,
pero a la gente de izquierda,
si es que la vió, no se acuerda,
mas confía en los de las flechas.
Y no es al indigenado,
que me quiero referir,
que igual, después de “subir”,
también los hizo a un lado.
A la traición ha abrazado,
y ciertos mudos de “Alianza”,
que razonan “con la panza”.
Los de la “partidocracia”,
que buscan nuestra desgracia,
con su actitud, ésta avanza.
Rectifique Presidente,
con los maestros y empleados,
no pueden ser jubilados,
con lo que Usted tiene en mente.
La edad la acepta la gente,
el máximo al de setenta,
pero por qué “mas de ochenta”,
sólo para el profesor,
qué sucede, por favor,
no creo que no se dé cuenta.
Oct 01/2010
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