Nadie puede negar que el Presidente
Econ. Rafael Correa Delgado, está cumpliendo en buena parte lo que ofreció en
campaña como su plan de gobierno; pero, también no es menos cierto que ha
violentado la Constitución en apoyo a sus colaboradores, en detrimento de
empleados y obreros, que totalmente lo apoyaron con su voto; entonces, por lo
que ha cumplido, no hay motivo de celebración, era y es su obligación hacerlo;
por lo que ha incumplido, hay que condenar su actitud; consecuentemente,…¿QUÉ
CELEBRAN?.
Esto resulta como cuando folklóricamente
se premia: al empleado que ha llegado puntual a su trabajo, tamaña majadería,
si esa es su responsabilidad; lo que debería hacerse es sancionar radicalmente
al irresponsable, incapaz, en un solo calificativo, al CORRUPTO; pero, eso
hasta hoy, no sucede, sigue campante la impunidad.
Retomando el asunto de la “celebración”,
cómo pueden merecer ese acto, hechos como: el CONEA, hizo un escándalo con la
evaluación de las universidades, para luego dar marcha atrás, porque
Constitucionalmente, dichos centros de estudios, tienen cinco años para
corregirse y someterse a la evaluación y admisión; el Ministro de Educación,
con el apoyo Presidencial, dispuso una “evaluación” del magisterio, con la
amenaza de destitución, ya se tenía “bachilleres para reemplazar a los maestros
destituidos”, hasta se anunció que se había “creado una partida de diez
millones de dólares” para el efecto; igualmente tuvieron que marchar en
reversa, por la Inconstitucionalidad; con el mismo magisterio, que al parecer
se ensañan con premeditación y alevosía, como dicen los abogados, se pisotea la
Constitución en su Disposición Transitoria Vigésima Primera, que puntualiza
como estímulo para su jubilación, cinco salarios básicos unificados del
trabajador privado por año de servicios, con un máximo de ciento cincuenta;
pero, por disposición superior, se está aplicando un Decreto Ejecutivo, que no
considera para nada los salarios unificados que dice en la Constitución, se
fija un máximo de dieciséis mil dólares para los profesores que tengan MAS DE
OCHENTA AÑOS DE EDAD Y MAS DE CUARENTA AÑOS DE SERVICIO DOCENTE, es decir, un
valor para que le paguen su enfermedad y sepelio; y, el “vuelto”, si es que
queda, lo deje de herencia, porque todos conocemos que el promedio de vida de
los ecuatorianos, no sobrepasa los setenta años; será esta actitud digna de
celebración?... Habrá que celebrar, que los maestro jubilados del año 2009,
hayan tenido que enjuiciar a nuestros gobernantes para que se respete la
Constitución y por ende sus derechos?.
No me cansaré de repetir, la mínima obra
del maestro, es ENSEÑAR A LEER Y ESCRIBIR, no se la puede cuantificar en
dólares, es el cimiento para todas las profesiones habidas y por haber; todos
nuestros gobernantes necesitaron esa enseñanza para poder llegar a ser lo que
son, ESA OBRA PALPABLE ES DIGNA DE RECONOCIMIENTO Y CELEBRACIÓN; solamente los
ingratos pueden desconocer la obra del Maestro, a todos ellos: Asambleístas,
jueces, ministros, prefectos, alcaldes, les quiero recordar; EL PEOR MONSTRUO
ES LA INGRATITUD; la mujer y el hombre, para no soslayar la equidad de género,
se identifica en la sociedad, NO POR LO QUE DICE SINO POR LO QUE HACE.
Feb 11/2010
No hay comentarios:
Publicar un comentario